Entre los problemas más comunes que se suelen hallar en los caninos/felinos, se encuentra la presencia de bultos o protuberancias cutáneas en el cuerpo. Estar alerta y actuar con rapidez, podría salvar su vida, puesto que algunos de estos bultos pueden ser la manifestación de enfermedades o patologías más graves.

Estos son los bultos más comunes en perros

Tumores: se trata de la causa subyacente a un bulto. Ignorarlo o no mirarlo no paliará el problema, contrario a ello hará que lleguemos más tarde a su tratamiento en caso de ser maligno.

Abscesos: los lipomas o bultos de grasa son comunes en perros de edad avanzada y no suelen tener mayor complicación. También pueden ser quistes consecuencia de una picadura.

Hematomas: un golpe puede derivar en un abultamiento y también un pinchazo de una vacuna.

Cicatrices: los más comunes son los queloides. Son totalmente benignos.

Verrugas: generalmente benignas, pueden ser molestas dependiendo de su ubicación.

Protocolo para explorar a mi perro cada día en casa

Los expertos recomiendan revisar cada día a tu perro desde la punta de la nariz hasta la punta de la cola.

Cabeza: revisa sus orejas, ojos o boca.

Cuerpo: acaricia y cepilla suavemente todo su cuerpo, si encuentras un bulto o más, píntalos. De esta manera, será más fácil recuperarlo al llegar al veterinario.

Patas: revisa especialmente la parte de las almohadillas y las uñas. Los perros tienen un capilar bajo la uña por lo que a la hora de cortarlas, y especialmente si son negras, hay que tener sumo cuidado. Mejor cortar poco que hacerle daño, ya que al capilar le acompaña un nervio.

Región anal y cola: en la parte anal los perros tiene unas glándulas que deberán mostrar buen aspecto y no estar obstruidas. En caso contrario, los perros suelen arrastrar el trasero por el suelo.

Los bultos en la piel de los perros son comunes y pueden tener diversas causas, algunas benignas y otras no. Por lo tanto, es crucial estar atentos a su aparición y seguir de cerca su desarrollo. La inspección diaria de nuestra mascota es fundamental para detectar cualquier cambio a tiempo y aplicar un tratamiento efectivo.